lunes, 11 de mayo de 2009

Capítulo 79.

No sabes cuánto tiempo llevo mirándote desde la ventana.
-¿Cuánto?
-¿Qué?
-Que ¿cuánto?
-¿Cuánto qué?
-Cuánto tiempo.
Mierda. Lo dije en voz alta.
Automáticamente los colores se me suben y bajo la mirada realmente avergonzada esperando que no piense que soy una perturbada estilo “retratos de una obsesión”, pero él me besa suavemente y me abraza.
Ya se fue dejando su olor tras de sí, impregnando con él todas mis cosas. Después de haber conseguido desintoxicarme de él en gran medida, por fin me dio a probar de su droga.
Desciendo de los cielos, piso tierra firme y, ahora que conseguí lo que quería, tengo la sensación de que ya he perdido todo el interés, manda huevos después de un año, aunque él parecía interesado, al menos mínimamente.
Pero, como en los viejos tiempos, hoy vuelve a obsequiarme con un seco y serio “hola”. No hay miradas furtivas, ni sonrisas discretas. Nada. Nada de nada. La paranoia, la inseguridad y la duda consiguen hacerse un hueco en mi mente. Cientos de preguntas se agolpan en mi cabeza y, ahora que la displicencia vuelve a ser una de sus cualidades, la predilección que siempre he tenido hacia él renace y me cuesta reconocerme a mi misma que quiero más, de su droga, digo.
Entre tanto, me toca volver a casa con la incertidumbre de la mano, pretendiendo descifrar el por qué de sus confusas acciones, e intentando, que no logrando, dominar mis nervios para no convertirme en un cenicero humano.
מרינה

2 comentarios:

Manu MAÑERO dijo...

hombre, se trata del caso típico de perro del hortelano. cuando no lo tiens, lo quieres. cuando lo tienes, no te parece tanto. es uno de los máximos problemas que planteó platón en su hipótesis sobre el amor, y de ahi tambien se desprenden frases como "quien la sigue la consigue" o "no valoras algo hasta que lo pierdes". en realidad todo en la vida consiste en buscar... sin tener por qué encontrar nada

Marina dijo...

el problema es que yo lo valoraba, y luego dejé de valorarlo, y ahora que lo he conseguido vuelvo a valorarlo, pero él no me valora, o sí, mira no sé me estoy haciendo un lío. qué complicado es todo.