domingo, 17 de mayo de 2009

Capítulo 83.

Entre grandes decepciones y asuntos varios añadidos me estoy pillando un buen pedo depresivo, de esos que como te quedes estancada acabas llorando a moco tendido en un portal sin saber muy bien por qué y mendigando abrazos a diestro y siniestro. Joder, yo no me puedo quedar en este punto. Engancho a una y le digo que vamos a la barra, si hoy me tengo que poner Martini en vena pues me lo pongo y no se hable más.
Ingiero sin parar, pero para mi desgracia no surte el efecto deseado y, desesperada ya, me paso al calimocho de la peor calidad, esa mezcla de Cola Papagayo y vino peleón, a ver si con este revoltijo explosivo dejo de quedarme en Babia cada cinco minutos y evito que todas y cada una de las canciones dejen de recordarme a ese minúsculo ser.
La cosa no mejora y además tengo que cargar con una tripota estilo niño somalí. Me da que antes esta chaqueta no me apretaba tanto, si continuo bebiendo a este ritmo la chaqueta estallará, y los botones saldrán despedidos a tal velocidad que acabarán por sacarle un ojo al primero que se cruce en su camino. Me imagino a mí misma disparando botones cada vez que hincho la barriga como si de una metralleta se tratase, apuntando, con premeditación y alevosía, a cualquiera que no me caiga en gracia. Me parto el culo yo sola durante un rato hasta que reparo en que llevo una litrona, mini para los madrileños, encajada dentro del pie. Mierda, entró hasta el fondo, me estoy viendo negra para sacarla y al final me resigno a que se rían de mí y demando ayuda para que estiren del litro y me liberen de él.
Antes de lo previsto acabo con esta extraña noche. Regreso a casa al son del gallo que me da los buenos días, un poco pronto, la verdad, con cierta incapacidad para atinar a meter la llave en la cerradura y ciega perdida, pero no provocado por la abundante, que no efectiva, ingesta de alcohol, sino porque me olvidé las lentillas y me negué a salir con las lupas.

מרינה

1 comentario:

Anónimo dijo...

tu que eres tan guapa y tan lista,
tu que te mereces a un principe o a un dentista... tuuuuu
te quedas a mi lado y el mundo me parece mas amable mas humano menos raro...

deja de reirte de la barriga somali
oli